La tecnología ayuda, eso lo tengo claro hace mucho tiempo, facilita en muchos aspectos y áreas la realización de las actividades, pero depender de ellas en un 100% nos hace dependientes y nos transforma en flojos.
Desde el 27 de Febrero pasado quedo de manifiesto nuestra comodidad y ahorro, la fuente para saber las intensidades de cada movimiento es una pagina web de la sociedad geológica norteamericana USGS.
Ahora bien, qué pasa con los sismógrafos nacionales, porque de que hay, las hay, pero dónde se encuentran los equipos y los resultados que se obtiene de ellos, ya que claramente no están disponibles los resultados para toda la población.
Una de las unidades que entrega datos es el Departamento de Geofísica de la Universidad de Chile que informa de algunos eventos ocurridos en el país, si se compara con su símil norteamericano, la versión criolla le faltan muchos datos para completar el puzzle sísmico, además trabaja en horario de oficina, de Lunes a Viernes.
Otra pseudo-fuente es la ONEMI entidad gubernamental que entrega una información desfasada con cero poder de garantía, quedando demostrado con el terremoto y el posterior tsunami.
El mal menor, que entrega información, en tiempo casi oportuno es el servicio estadounidense, aunque su problema radica que es un satélite, por lo que la información puede contener cierto error, aunque es un sistema que está ampliamente respaldado y aceptado por la comunidad científica.
Particularmente, al ser un servicio de información operado por números matemáticos y operaciones aritméticas entrega datos que después deben ser confirmados, por lo que la instantaneidad de los resultados queda sujeta a evaluación, lo que la misma pagina especifica, pero pocos son los que entienden y toman los datos entregados como una información certera y veraz.
Supuesto movimiento sísmico, posteriormente la pagina elimino el aviso, ya que éste evento jamás ocurrió.
Desde el 27 de Febrero pasado quedo de manifiesto nuestra comodidad y ahorro, la fuente para saber las intensidades de cada movimiento es una pagina web de la sociedad geológica norteamericana USGS.
Ahora bien, qué pasa con los sismógrafos nacionales, porque de que hay, las hay, pero dónde se encuentran los equipos y los resultados que se obtiene de ellos, ya que claramente no están disponibles los resultados para toda la población.
Una de las unidades que entrega datos es el Departamento de Geofísica de la Universidad de Chile que informa de algunos eventos ocurridos en el país, si se compara con su símil norteamericano, la versión criolla le faltan muchos datos para completar el puzzle sísmico, además trabaja en horario de oficina, de Lunes a Viernes.
Otra pseudo-fuente es la ONEMI entidad gubernamental que entrega una información desfasada con cero poder de garantía, quedando demostrado con el terremoto y el posterior tsunami.
El mal menor, que entrega información, en tiempo casi oportuno es el servicio estadounidense, aunque su problema radica que es un satélite, por lo que la información puede contener cierto error, aunque es un sistema que está ampliamente respaldado y aceptado por la comunidad científica.
Particularmente, al ser un servicio de información operado por números matemáticos y operaciones aritméticas entrega datos que después deben ser confirmados, por lo que la instantaneidad de los resultados queda sujeta a evaluación, lo que la misma pagina especifica, pero pocos son los que entienden y toman los datos entregados como una información certera y veraz.
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